jueves, 11 de junio de 2009

LOS ENTREMESES DE LA BODA

Hoy he pasado el día con unos buenos frailes que celebraban un aniversario más de su fundación. Una eucaristía presidida por el obispo de su diócesis, visita a la casa natalicia del fundador con entremeses incluídos y después nos han obsequiado con comida en un restaurante. Una jornada festiva y fraterna, impregnada de agradecimiento a Dios por las bendiciones con que enriquece a esos hermanos y a las personas que ellos atienden. Dispuestos a comenzar con el primero de los platos que nos están sirviendo, los comensales de mi mesa hablan del poco apetito que existe después de haber picoteado en los entremeses. El obispo, optando por la prudencia, no critica que justo antes de la comida nos hayan puesto entremeses en la casa del fundador; él decide contar una anécdota y así deja evidente también su escaso apetito. Una pareja de novios se encuentra negociando con un restaurante el banquete de su boda. Le parece un precio excesivo y se ponen a pensar qué pueden suprimir del menú con el fin de abaratar el presupuesto. Leen el menú una y otra vez y determinan que suprimirán los entremeses. En ese momento, el encargado del restaurante les dice: "Si suprimen los entremeses, la comida se encarecerá".
¿Lo habéis pillado? Los 8 comensales que nos encontrábamos en la mesa del obispo soltamos con naturalidad unas carcajadas. Habíamos captado el mensaje.
Con esto quería llegar a la cena del sábado, y los entremeses de la boda me dan pie para deciros que vengáis bien merendados de casa y cenéis como de régimen en la parroquia. No sea que a la comisión organizadora de la cena le entre la tentación de aumentaros el donativo que debéis entregar.

2 comentarios:

  1. Sorprendida me quedo¡¡¡ No os gustaría que cuando os inviten sean generosos, esplendidos, que den lo mejor que tienen ..No que te pongan entremeses, para que no comas mas. Yo conozco una Iglesia que es madre, y como madre se dona y se dona sin medida, con abundancia ...El mayor placer es poder ver como disfrutan las personas que quieres. Dicho lo cual, no me cabe duda que nos sacarán todo lo que puedan. Creo que el fin lo justifica.

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  2. No se.... yo como que fio de la comisión organizadora de la cena. He comido paella y arroz varias veces, y tengo la certeza de que las costillas eran aplanadas, por lo que puedo asegurar que ellos no nos dan gato por liebre, asi que hago un ejercicio de confianza en el genero humano y voy a ir sin merendar y con la intencion de dar una propina, no a los cocineros, sino a los entretejedores de conspiraciones pa que tambien queden satisfechos, que estamos llamados a querer a todo el mundo esto incluye a los agarraos. Animo estamos con vosotros.

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